Uno de los principales problemas a los que se enfrentan los propietarios, es a sufrir un impago en el alquiler. Puede ocurrir y lamentablemente es algo aún más frecuente en tiempos de crisis y de recesión económica. En la siguiente guía te damos 7 claves para reducir el impago de alquiler.
Aunque siempre se puede sufrir un impago por cualquier razón, en la siguiente guía analizamos las claves para reducir la probabilidad de impagos en el alquiler.
En primer lugar, es importante firmar un buen contrato de arrendamiento, para que la relación entre arrendador y arrendatario arranque como debe, con buen pie. Para ello, el documento debe tener información relevante como los datos personales de ambos, la duración del contrato, el importe mensual, plazos de una posible extinción del contrato, etc.
En definitiva, debe existir un buen contrato para poder reclamar en caso de impago. Todo debe estar bien claro y bien redactado. Por ello, es mejor utilizar una plantilla de contrato profesional como las que encontrarás en Rentger.
Lo siguiente, pasa por pedir una serie de garantías al inquilino. La más habitual es la de uno o varios meses de fianza, aunque hay más alternativas. Entre ellas, se encuentran el seguro de impagos y también el aval bancario.
Cuando un inquilino no es del todo solvente o hay dudas, es posible que no sea suficiente con los meses de fianza, por lo que se podría pedir un seguro de impago de alquiler o bien un aval bancario, a decisión del propio inquilino.
El seguro de impagos es más frecuente, pero ambos métodos son seguros y aportan tranquilidad al propietario, por lo que puedes elegir el que más te interese.
Si bien es cierto que el inquilino puede dejar de pagar por muchas razones. Pero si la relación entre propietario e inquilino es buena, es menos probable que deje de pagar. Si bien es cierto que puede abusar de la confianza, si el propietario se muestra respetuoso y no interfiere en la vida del inquilino, es más probable que pague, porque estará contento y no querrá perder el piso.
Cuando el piso tiene años, los problemas pueden estar completamente a la orden del día. Es algo normal e inevitable. De hecho, el propio inquilino lo sabe.
Puede que se estropee la nevera, la lavadora o que haya otros problemas como fugas de agua o incluso problemas con el gas. En todos estos casos, es importante que el propietario responda rápido y trate de solucionarlo con la mayor brevedad posible, dado que si no lo hace puede afectar al inquilino.
Hay condiciones bajo las cuales no se puede vivir y si se tiene un contrato de alquiler y se firman unas condiciones, se debe vivir bajo ellas. Por eso es clave que el propietario actúe lo más rápido que pueda para solucionar cualquier imprevisto. Esto hará que el inquilino sepa que el propietario responde y no quiera perder el piso.
Sin embargo, si el propietario pasa, empezará una mala relación con el inquilino, que puede desencadenar en imperfectos o posibles impagos.
Si se establece en el contrato, se pueden hacer subidas anuales en el alquiler conforme al IPC. Sin embargo, como mucho hay que ceñirse a eso, dado que si se hacen subidas excesivas y desproporcionadas, el inquilino podría no hacer frente y dejar de pagar o abandonar la vivienda.
Recuerda que los meses vacíos te cuestan dinero, porque dejas de ingresar. Por eso es importante que lo pongas sobre una balanza antes de tomar la decisión y comunicarle subidas de alquiler excesivas por la inflación.
Evidentemente, si la vivienda es nueva y no quieres mascotas, debes dejarlo claro en el contrato para evitar malentendidos y posibles molestias del inquilino porque le afecte gravemente y tenga que dejar a su mascota a un lado. Es una de las primeras cosas que se deben detallar por escrito para evitar problemas.
También puedes tratar de mostrarte flexible para que el inquilino esté contento y no quiera abandonar el piso ni mucho menos deje de pagar las mensualidades.
¿Sabías que cada inquilino tiene un scoring diferente? Para reducir la probabilidad de sufrir un impago en tu inmueble, siempre puedes comprobar si tiene deudas o si es de confianza.
En Rentger ya te contamos cómo seleccionar el inquilino perfecto. Echa un vistazo a la anterior guía y descubre cómo elegir al mejor entre los distintos candidatos que se presenten para vivir en tu piso de alquiler.
Estas claves te ayudarán a reducir la probabilidad de que el inquilino deje de pagar. Aunque nunca se sabe, sin duda te pueden ayudar.