Cuando se es principiante, es habitual cometer errores, ¡le pasa a todo el mundo! Para que lo lleves lo mejor posible, en esta guía analizamos los errores más frecuentes de los propietarios principiantes y cómo evitarlos para que todo vaya bien.
Propietarios principiantes: errores comunes y cómo evitarlos
Es normal cometer errores, incluso cuando se está en el rol del propietario y se alquila una vivienda a un tercero. Sin embargo, el hecho de conocer esos errores ‘comunes’ que cometen la mayoría de propietarios principiantes te puede ayudar a no cometerlos. Veamos cuáles son y qué hacer.
1- No comprobar si el inquilino es de confianza
El primer error de manual, pasa por no comprobar si el inquilino es solvente. Hay propietarios a los que pedir nóminas o preguntar por los ingresos le puede resultar incómodo, pero es lo que hay que hacer para comprobar que puede pagar el alquiler.
Para evitar caer en este error, lo que puedes hacer es pedirle referencias, verificar su historial crediticio o si tiene antecedentes por mal inquilino. Una forma muy cómoda pasa por consultar esta base de datos de inquilinos morosos, así podrás saber rápidamente si tu potencial inquilino forma parte de ella y evitar que un potencial moroso ocupe tu propiedad.
2- No redactar correctamente el contrato de alquiler
Hay propietarios principiantes que no saben y no especifican claramente las condiciones del alquiler en el contrato, lo que puede generar malentendidos con el inquilino.
Lo ideal pasa por redactar un contrato de alquiler bien redactado, con las condiciones de pago, las cláusulas y las consecuencias en caso de incumplimiento. Por ejemplo, estas son algunas de las cláusulas que se pueden incluir:
- Subir el precio del alquiler anualmente de acorde al IPC.
- No permitir mascotas en la vivienda.
- No permitir el subarrendamiento de la vivienda.
- No acometer reformas sin el consentimiento del propietario.
Si tienes dudas, lo mejor es delegar esta parte en un profesional. En Rentger encontrarás una plantilla de contrato de alquiler de vivienda que te puede ser muy útil para alquilar tus inmuebles.
3- No conocer los derechos del inquilino
Los propietarios novatos también pueden excederse sin darse cuenta de ello. En muchos casos, esto sucede por no conocer los derechos del inquilino. Por ejemplo, si alquilas tu vivienda y hay un contrato de alquiler vigente, puede que no puedas echar a tu inquilino aunque quieras. Digamos que, hay condiciones.
El problema de no conocer los derechos del inquilino es que te puede ocasionar problemas legales o multas. Nuestro consejo es que trates de informarte sobre las leyes de alquiler en tu zona, así como las regulaciones en cuanto a desalojo, subidas en la cuantía del alquiler o asuntos de mantenimiento de la propiedad.
4- No realizar ningún mantenimiento a la vivienda
Otro de los errores frecuentes de los propietarios principiantes, pasa por no hacer ningún tipo de mantenimiento de la vivienda, dado que creen que es cosa del inquilino. Lo cierto, es que debe realizarse un mantenimiento preventivo periódicamente, cuando sea necesario.
Por ejemplo, si en el domicilio hay una caldera, es responsabilidad del propietario realizar el mantenimiento y pagar por ello. No es una responsabilidad que recaiga sobre el inquilino, que no tiene que hacer nada. Lo mismo en cuanto al mantenimiento de los electrodomésticos, fontanería, electricidad, etc.
5- No separar un 5% de la mensualidad para reparaciones o imprevistos
Otro de los errores comunes de los propietarios principiantes, pasa por creer que todo el dinero del alquiler va íntegro para el bolsillo, cuando no es así. A menudo los propietarios no se dan cuenta de que pueden surgir gastos inesperados, como un electrodoméstico que se rompe y que hay que cambiar.
Si un electrodoméstico se rompe por un uso normal o paso del tiempo, es responsabilidad del propietario cambiarlo por otro. Por eso se recomienda separar al menos un 5% de la mensualidad para este tipo de gastos. Por ejemplo, si tienes un alquiler de 1.000 euros, trata de separar al menos 50 euros todos los meses (600 euros al año), para este tipo de gastos.
6- Fijar un precio de alquiler demasiado bajo o alto
Cuando no se tiene experiencia alquilando inmuebles, es normal tener dudas sobre qué cantidad pedir. El problema es que cobrar un alquiler demasiado bajo puede generar pérdidas, mientras que cobrar un alquiler demasiado alto puede hacer que no encuentres inquilinos y que tengas el piso vacío buena parte del tiempo.
La clave está en analizar bien el mercado y fijar un precio competitivo. Luego, puedes incluir en el contrato subidas adaptadas al IPC anual.
Estos son algunos de los errores más frecuentes que cometen los propietarios principiantes. Al conocerlos, evitarás que seas el siguiente en cometerlos y te aseguras una mejor experiencia al alquilar tu inmueble.
¿Te ha quedado alguna duda?
