El COVID-19 o coronavirus lo ha cambiado todo por completo. Sobre todo, ha afectado a la manera en la que vivimos, a nuestro día a día. Y, en gran medida, a todo el proceso de alquiler de una vivienda.
El COVID-19 o coronavirus lo ha cambiado todo por completo. Sobre todo, ha afectado a la manera en la que vivimos, a nuestro día a día. Y, en gran medida, a todo el proceso de alquiler de una vivienda. Pero, ¿de qué manera? Lo vemos:
El mercado inmobiliario no ha parado prácticamente nada. De hecho, los meses de parón a causa del confinamiento, se recuperaron durante el verano. Por lo que, aunque caminamos desde el 2019 hacia una tendencia bajista en lo que respecta a las compraventas, los alquileres siguen siendo la opción más buscada.
Pero, ¿cómo gestionar el alquiler de vivienda hasta que exista una vacuna segura? Podemos centrarnos principalmente en la seguridad en materia de salud y económica. Ahora veremos por qué:
Los inquilinos y los propietarios lo han hecho lo mejor que han podido a lo largo de estos meses, con mascarilla y manteniendo la distancia de seguridad. Por lo que, seguir el protocolo de seguridad es el primer punto a cumplir.
Claro que, no podemos descuidar la parte económica. Como sabrás, la crisis del coronavirus ha desencadenado una gran oleada de ERTEs y muchos inquilinos se han visto con importantes problemas para pagar el alquiler todos los meses. Por lo que, podríamos decir que durante el COVID los propietarios asumen más riesgo.
Entonces, ¿cómo blindarse? ¿Cómo protegerse frente a un posible impago? Recordemos que, en época de crisis se producen más impagos. Por ello, es fundamental asegurarse que el inquilino es solvente y de que dispone de garantías.
Lo aconsejable, es poner un seguro de pago de alquileres, varios meses de fianza, aval bancario, nóminas, etc. Incluso conocer sus deudas a través de la Central de Información de Riesgos del Banco de España De hecho, ya te contamos en profundidad cómo gestionar los impagos.
No obstante, también es importante tratar otras cuestiones como el tema de las moratorias en el pago del alquiler o la evolución del mercado. Estas son algunas de las preguntas más frecuentes y sus respuestas:
Los inquilinos que estén pasando por una situación vulnerable debido al COVID, pueden solicitar una moratoria del alquiler. Para ello, no se puede superar el límite de 3 veces el IPREM, más 0,1 si se tienen hijos o mayores de 65 años al cargo.
Por otro lado, la renta de alquiler, gastos y suministros básicos no pueden superar el 35% de los ingresos netos que conforman la unidad familiar.
También pueden acceder a este tipo de ayudas autónomos o profesionales que tengan un local de trabajo en alquiler y no estén percibiendo ingresos por no poder abrir o porque sus ingresos se hayan reducido en el 75%.
De hecho, el Gobierno ha prometido dar hasta 900 euros al mes para pagar el arrendamiento durante 6 meses a los inquilinos que no hayan podido pagar los microcréditos avalados por el Estado.
Es muy probable. Los millennials van a tener que enfrentarse a otra crisis económica, la segunda, lo que provocará que les resulte más complicado acceder a la compra de un inmueble. Lo mismo para cualquier otro trabajador, independientemente de su puesto o edad. Por lo que, es probable que aumente la oferta de alquileres.
De hecho, si los ciudadanos pierden liquidez y se quedan sin empleo, no son tan confiables para los bancos, por lo que podrían negarles una posible hipoteca y no quedarles otra opción que seguir viviendo de alquiler. Digamos que, todo apunta a que esta situación mantendrá en auge los alquileres.
Los alquileres podrían verse afectados si el Gobierno fija un precio máximo. De hecho, los expertos aseguran que esto reduciría la oferta y haría que los ciudadanos, que van a necesitar una vivienda de alquiler más que nunca, no tengan esa opción. En definitiva, podría perjudicar, una vez más, a los más desfavorecidos.
No obstante, habrá que ver si esta medida aparece recogida en los Nuevos Presupuestos Generales del Estado.
Puede que para muchos inquilinos no haya mejor regalo de Navidad que perdonar el pago de una cuota de alquiler o dejar más flexibilidad para su abono. Podría ser un gran gesto de generosidad. De hecho, hay propietarios que admitieron en redes sociales haberlo hecho durante el confinamiento. Lo dejamos a tu elección.
Lo que sí es fundamental, es gestionar todo correctamente con un programa gestión arrendamientos, para que sepas en todo momento lo que entra y lo que sale, y no tengas ningún problema de pérdida de rentabilidad con tus inmuebles.
Ten en cuenta que, por seguridad, cobrar renta online es cómodo y rápido. Incluso es una época en la que se tiende a firmar contratos alquiler online, debido a que es más flexible y seguro para todos.
Esperamos que estos consejos te sean útiles para alquilar tu vivienda durante el coronavirus. ¡Acuérdate de utilizar Rentger para ser más productivo!