Cómo dejar un piso de alquiler y acabar bien con el casero. ¿Con cuánta antelación hay que comunicarlo al propietario?
Llega un día en el que los inquilinos le comunican a su casero que ya no van a seguir en su vivienda, pero, ¿cómo dejar un piso de alquiler correctamente? Te contamos todo lo que tienes que saber para hacerlo bien.
Aunque estemos conformes en un piso de alquiler, hay veces en las que nos apetece irnos a otro o dar el paso de comprar. Por lo que, toca enfrentarse a hablar con el casero y comunicarle que ya no vamos a seguir. ¿Cómo dar el paso?
Evidentemente, no siempre es una decisión fácil. Hay inquilinos que tienen miedo a que les pongan cualquier problema o a no recuperar la fianza que tanto necesitan. Sin embargo, en buena parte de los casos, los dueños del inmueble suelen ser razonables y no ponen ningún tipo de problema.
Por ley, hay que comunicarlo con al menos 30 días de antelación. Es decir, se pagaría esa mensualidad extra para avisarle con el tiempo al propietario de que se va a dejar el piso y dejarle margen para que busque a nuevos inquilinos.
Evidentemente, cuanta más antelación mejor. Si lo puedes comunicar con más tiempo es algo que el propietario siempre lo va a agradecer, pero la ley marca al menos esos 30 días de margen.
Normalmente, de forma verbal es suficiente. Sin embargo, en los casos en los que existe un aval bancario, hay inquilinos que buscan protegerse las espaldas y lo comunican también por carta certificada o burofax.
El piso de alquiler debes dejarlo tal y como se te indica en el contrato o bien como te lo encontraste. Normalmente, el propietario le deja a sus inquilinos la vivienda en buen estado y limpia, y debe devolverse igual.
También hay que tener en cuenta otros aspectos, como por ejemplo el gas. Si el propietario le deja 2 bombonas de butano al inquilino, lo habitual es dejarle dos enteras cuando marche y no dos vacías. O lo podría descontar de la fianza.
En el caso de que haya algún desperfecto, lo mejor es comunicárselo al propietario, porque es posible que no lo tenga si actúas con buena fé.
En el caso de tener la luz y el agua a tu nombre, lo ideal es hablar con el casero para que cambie el nombre y la domiciliación bancaria. Es algo que se hace continuamente, por lo que no tendrás de qué preocuparte, es muy rápido.
¿Y si me siguen pasando las facturas? Habla con el casero, porque puede que haya algún problema o que te sigan pasando facturas que realmente te corresponden, dado que algunas se emiten tarde. Pero si no son tuyas, recuerda que incluso las puedes devolver desde la banca online.
Por ley, el propietario tiene 30 días para devolver la fianza desde el momento en el que el inquilino deja el piso. De esta forma, puede revisar si está todo correcto.
Hay propietarios que lo devuelven directamente al momento, cuando quedan con el inquilino para la entrega de las llaves. Sin embargo, por ley pueden acogerse al mes de margen.
En el momento de la entrega de las llaves, lo normal es que el propietario le devuelva el aval original al inquilino. De esta forma, puedes ir al banco para darlo por finalizado.
¿Y si el casero no lo lleva? Antes de nada, es importante que le recuerdes que debe llevarlo el día de la entrega de llaves. En el caso de que vea desperfectos, podría no querer hacerlo para pagarlos ejecutando el aval. Pero en cualquier caso, es muy importante que intentes recuperar el aval original.
Siguiendo uno a uno estos consejos, no tendrás ningún problema a la hora de dejar tu piso de alquiler y quedar bien con tu casero. Piensa que en cualquier momento podrías necesitar de sus referencias para otro piso de alquiler o incluso volver ahí más adelante, por eso es importante intentar quedar bien.
Sin embargo, es normal que si es tu primera vez lidiando con un casero tengas dudas sobre cómo dejar una vivienda de alquiler. Pero si te ha quedado alguna otra duda, recuerda que como expertos en software de gestión de pisos de alquiler, puedes preguntarnos lo que necesites. ¿Hablamos?